Vodafone contempla diferentes supuestos en los que un cambio de tarifa puede implicar una actualización en las condiciones firmadas inicialmente. Sin embargo, el operador rojo también explica que existen una serie de escenarios en los que, en caso de producirse, no se actualizan ni cambian las condiciones iniciales de contratación. Te los contamos.
Las operadoras se reservan el derecho a actualizar las condiciones de contratación firmadas inicialmente en diferentes situaciones. Uno de los ejemplos más claros se produce cuando cambiamos la tarifa contratada o contratamos un nuevo servicio que, en función del caso concreto, puede conllevar la firma de un nuevo compromiso de permanencia o la devolución de los antiguos equipos que estábamos disfrutando hasta ese momento.
El operador rojo también explica que un cambio de tarifa puede suponer una serie de cambios en los servicios asociados a nuestra tarifa anterior si esta incluía algunos servicios promocionados o gratuitos, como la MultiSIM OneNumber o YouTube Premium, entre otros. Sin embargo, la compañía también confirma que nuestros servicios no se actualizan ni cambian las condiciones de contratación en una serie de casos que te contamos a continuación.
Estas son las situaciones en las que no se actualizan ni cambian las condiciones de contratación
Vodafone explica que si cambiamos de domicilio, pero no cambiamos la tecnología, las condiciones del contrato firmado no van a cambiar y seguiremos disfrutando de las mismas características que firmamos en su momento. Recuerda que es importante que la tecnología no cambia, de lo contrario, las condiciones del contrato podrían cambiar y esto se podría traducir en un incremento del precio a abonar.
Muchos abonados también se preguntan cuáles son las posibles consecuencias de que el router o el decodificador del operador se rompa debido a alguna incidencia. En el caso de que nos encontremos ante esta situación, Vodafone mantiene que el contrato quedaría bajo las mismas condiciones iniciales y sería la operadora la encargada de sustituir el mismo.
Los cambios o los duplicados de una tarjeta SIM o eSIM tampoco conllevan ningún cambio. Es suficiente con ponernos en contacto con la compañía para solicitar el mismo y abonar el coste correspondiente, que es de 5€.
Más situaciones que no conllevan cambios
Hasta ahora, hemos hecho referencia a las situaciones más habituales con las que nos podemos encontrar en nuestro día a día. Pero, además, también podemos tener alguna duda cuando nos suspenden la línea porque lo hemos solicitado así o porque hemos tenido un impago por cualquier motivo. En el momento de la reactivación, nuestras condiciones se mantendrían y no tendríamos motivos para sufrir ningún cambio en las condiciones firmadas inicialmente.
Lo mismo ocurre si optamos por activar un servicio como el desvío de llamadas o alguna restricción en nuestra línea, Vodafone incluye todos ellos en las condiciones generales de contratación.
En el caso de que queramos activar un servicio de acceso a contenidos de streaming, como Netflix o Max, por ejemplo, tampoco se producirían cambios en nuestras condiciones de contratación. Sin embargo, si estos servicios están bonificados y los disfrutamos gratis por haber contratado una tarifa en concreto, sí que es posible que Vodafone modifique el contrato, como ya hemos indicado previamente.
Como podemos comprobar, Vodafone contempla una amplia variedad de casos con los que nos podemos encontrar durante nuestra trayectoria como clientes que no requieren de ninguna actualización en el contrato ni suponen una ampliación de la permanencia. Así que en el caso de que los suframos, podemos tener la seguridad de que nuestras condiciones como clientes no van a cambiar.
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